miércoles, 24 de diciembre de 2014

El valor de la navidad


¿Qué significado le das a la navidad?

Este es un tema que aficiona a muchos, y sobre el cual tantos críticos, sociólogos y cualquier otro particular  habla, pero, ¿Qué es navidad?

Pues yo diría que es un momento del tiempo que nos permite compartir con nuestros seres queridos sentimientos y sueños que nos hace crecer y ser mejores; es uno de los momentos más perfectos para demostrar nuestros más íntimos afectos, para dar las gracias por existir, para dar las gracias por la familia y los amigos que tenemos, para agradecer por todo lo bueno que algún ser supremo nos concede día a día, por ese alimento, por ese vestido, por ese aliento, y por todo lo que se nos presenta de forma repentina.

Navidad, también es un buen tiempo para sonreír, para dejar tras el sofá los resentimientos, para encender junto con las velas nuestros sueños, y apagar con ellas mismas cualquier remordimiento que nos queme por dentro. Navidad es reconciliación, navidad son sueños, son presentes, son esperanzas y buenos deseos.

¿Qué no es navidad? Para mí la navidad no solo significa obsequios, no son cenas, no es el vino, no es la nieve, no son las luces, ni siquiera el árbol con sus despampanantes bombillos azul cielo. Pienso que esto no le da un significado a la navidad, porque,  qué es un vino si no lo degustas con alguien querido; creo que la navidad depende del significado que nosotros le demos, depende de uno convertir esta época en una temporada comercial o vivirla de manera tan especial e intensa; obsequiando amor, alegría, perdón, como el disfrutar del calor humano de nuestros padres, de nuestros hermanos, de nuestros abuelos, que supera cualquier otro obsequio, que arde sobre cualquier luz, y que sabe mejor que cualquier conserva de vino.

Navidad es mi deseo y mi agradecimiento.

martes, 16 de diciembre de 2014

Convergencia Mediática


La convergencia mediática es una poderosa arma que en los últimos años ha bombardeado a la sociedad a través de las telecomunicaciones y las tecnologías digitales.
La convergencia mediática sugiere la idea de que los objetos que se mueven hacia un mismo punto se unan para formar, estructurar y activar un  solo y poderoso medio u objeto de comunicación. Es decir, que los medios de comunicación masiva como: la prensa, la revista, la radio, los estudios discográficos, la televisión y el cine; unan sus fuerzas con este popular canal denominado: “internet”, ya sea con el propósito de informar, entretener o educar.
Este tipo de convergencia permite al ser humano trabajar con múltiples medios integrados de forma simultánea, ampliando de esta manera su mercado, economizando dinero, e informando en tiempo real. Con el uso de las tecnologías, las telecomunicaciones extienden el número de receptores, y estos al mismo tiempo receptan información gratuita, que van directo a sus ordenadores, celulares, agendas electrónicas, etc.; siempre y cuando estas estén conectadas a una fuente de internet.
Ahora bien, al analizar la situación de la convergencia mediática en el Ecuador, tenemos que señalar, que nuestro país muy recientemente ha empezado a generar información utilizando la tecnología digital, es por eso que no existen una historia a la cual no nos podemos referir, pero a lo que si podemos hacer alusión es a la rápida evolución que  ha tenido la idea de incorporar la red a los medios de comunicación masiva. Hoy en día escasos son los periódicos, las radios o los canales de televisión nacional que no cuenten con su sitio web en la red, donde  los medios de comunicación cuelgan información actualizada y con más detalle, puesto que el medio así lo permite. Esto hace que el público pueda revisar las veces que quiera el mensaje con el fin de captar lo que el comunicador quiere interpretar.
Aunque no todos los medios de comunicación masiva en nuestro país estén anexos al internet, esta formalidad va adquiriendo terreno y se espera que en poco tiempo los medios informativos nacionales adquieran un estándar, que los ubique en la misma línea de otros medios de comunicación masiva mundiales.
Como es de nuestro conocimiento, con el surgimiento del periodismo digital, todo ser humano ha tomado riendas en el mundo de las comunicaciones, es así que cualquier persona puede ser autor de información, cumpla o no con la veracidad, credibilidad, clasificación, o autoría que se requiere al momento de comunicar; poniendo en tela de duda cualquier emitido que se difunde por un medio digital.
A esto se suma, que no existe vigilancia alguna sobre el tipo de información que se difunde por este medio, desamparando de esta manera al público que se encuentra expuesto en mucho de los casos a blogueros charlatanes, que no tienen ninguna experiencia en el campo de la comunicación; pero, que sin embargo difunden noticia que pone al televidente en un plano confuso, llenándolo de más dudas de las que quizá tenía antes de acceder al medio digital.
En la era del periodismo digital no existen guardabarreras que controlen en su totalidad la información que se sube a este medio de comunicación; tal como sucede en los medio tradicionales, por lo que nos hemos convertido en los guardabarreras de esta era digital, y es por eso que es necesario que cada uno de nosotros califiquemos, critiquemos y analicemos las noticias que se nos presenta a través de este moderado. Si bien es cierto la tecnología ha colaborado inmensamente al desarrollo de las telecomunicaciones, pero también nos ha involucrado en un mundo de mentira, engaños, pero sobre todo de desinformación, el cual no es el fin de la convergencia digital.

 

 

lunes, 8 de diciembre de 2014

Tiempo.



¿Por qué existe el tiempo? ¿Fue alguna fuerza suprema la que nos alzó tal muralla, con el fin de estancarnos en fosas que nos juegan la mente y nos arrancan el alma?
Y es que es el tiempo la cadena y la condena  que orillan nuestra existencia, es por el tiempo que miles de personas se envuelven en tristezas, se compran y venden en mercados negros de momentos. Por el tiempo mueren y acecinan los plebeyos. El tiempo amputa los sueños, intranquiliza  las conciencias, es un poderoso estante donde quedan guardadas solo las más exquisitas ideas.
Cuantos de nosotros hemos sido presa de este fenómeno sobrehumano, cuantos no hemos caído en la depresión por pensar en que nuestra vida se corre entre los punteros de un reloj usado, pensar en que los minutos, en que los segundos, en que los días, los meses y los años se nos vuelan con el viento, nos causa angustia, nos hace querer retroceder o detener el tiempo.
En el hombre el tiempo pesa y se convierte en un embustero, es como la sombra que nos persigue en cada momento, no es necesario llevar consigo un puntero para saber que avanzamos hacia la hoguera que nos ata al cuello, no es necesario llevar consigo el compás del tic-tac para saber que se nos va formando marcas en el pellejo. Paso a paso el cabello se pinta de un gris cielo, cada vez que parpadeo tras de mí se desencadena una odisea  en secreto, al respirar con el aire se me van los años, y cuando despierto siento que ya estoy viejo.
Con la joroba el hombre muestra su trote por la línea del tiempo, con sus pasos secos muestra la experiencia, el cansancio y las huellas del trajín que lo arrastra al fin de su existencia. Cuantos no hemos buscado alguna poción mágica que nos alarguen la vida hacia una eterna, cuantos daríamos todo por prolongar nuestros ideales de ensueño. Pero eso es el tiempo, una medida incontrolable que nos acaba, que nos sepulta en aquel frio agujero. Es el verdugo que a todos, sin distinción alguna, nos encierra en el sótano junto a otros cuerpos.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

La Ladrona de Libros.



Algo que resalto de este film y que para mí en especial merece ser tratado, es la actitud de la mama adoptiva de Liesel Meminger, Rosa Hubermann, ya que durante el desenlace de los actos, su comportamiento hacia Liesel Meminger y su padre adoptivo Hans Hubermann va cambiando. En un principio podemos presenciar una Rosa Hubermann muy recia, grosera, casi sin sentimientos; pero, que conforme surgen las disputas por parte de la milicia del Tercer  Reich, la misma que amenaza la seguridad de su familia, Rosa Hubermann transmuta su carácter, de una mujer resentida y dolida por la de una madre y esposa comprensible y cariñosa.
Esta transición para mi tiene un gran significado, porque da a entender que muchas de las personas llevamos una coraza entre nuestro mundo exterior y nuestra alma, la cual nos impide desenvolvernos y apreciar a las personas que tenemos a nuestro alrededor, desentendiéndonos por completo de los sentimientos que se desencadenan fuera de nosotros, y de todo lo que debería ser importante para nosotros, pero que lo hemos dejado de lado por amalgamarnos de rencor, de odio, de egoísmo…
Esta es la enseñanza que me dejo La Ladrona de Libros, y bueno es un largometraje que abarca muchos sentimientos encontrados, que no solo los vivieron es ese entonces, si no que aun en la actualidad también se dan, de diferentes formas quizá, pero con un fondo similar.